Brownie

El brownie es un bizcocho típico de los EEUU que debe su nombre a su color marrón. Dicen que nació por el olvido de un pastelero cuando estaba haciendo un bizcocho y no le puso la  levadura. El brownie es sin duda el postre estrella en mi casa y seguro que en otras muchas. A nosotros nos gusta jugosito y espolvoreado con un poco de cacao por encima. Pero también podéis tomarlo templado con una bola de helado de nata, vainilla o incluso frambuesa.

Lo más importante es utilizar un chocolate de calidad y observar la superficie del bizcocho para saber cuando debemos sacarlo del horno.

Es importante conocer y dominar nuestro horno. Normalmente el brownie se suele cocinar a unos 180ºC para que se cree la costra de la superficie rápidamente, pero todo dependerá de lo que calienten vuestros hornos.

Receta de brownie

(para molde de 22×22 cm)

Ingredientes

  • 220 gr de mantequilla
  • 70 gr de azúcar moreno o de coco
  • 180 gr de huevo (3 huevos L)
  • 150 gr de cobertura de chocolate (70% cacao)
  • 15 gr de cacao en polvo
  • 80 gr de harina floja o repostera
  • 1 c.s. de pasta de vainilla
  • 80 gr de nueces

Preparación

  • Batimos la mantequilla a temperatura ambiente junto con el azúcar hasta conseguir una crema.
  • Incorporamos los huevos de uno en uno. Batimos cada vez que ponemos un huevo a la crema y no añadimos el siguiente hasta que no se haya mezclado por completo.

  • Derretimos la cobertura de chocolate al baño maría. Cuando esté templado lo añadimos a la mezcla anterior.
  • Mezclamos los ingredientes secos y los tamizamos sobre nuestra masa.
  • Por último añadimos las nueces troceadas de manera gruesa.
  • Cubrimos nuestro molde con papel de horno y horneamos a 180ºC en horno precalentado arriba y abajo, durante aproximadamente 20 minutos. Todo dependerá del grosor de vuestro brownie.
  • Debemos estar atentos para que no se haga en exceso porque perdería la jugosidad típica del brownie. Cuando la superficie del brownie empiece a cuartearse debéis pinchar con un palillo y comprobar que está en su punto. Aunque salga algo manchado no os preocupéis porque el interior del bizcocho debe estar cocido pero jugoso. Pero el palillo no debe arrastrar masa cruda. Lo aconsejable es que cuando haya pasado la mitad del tiempo de cocción estéis atentos al horno, e incluso le deis la vuelta al molde para que se haga la costra de manera uniforme.
  • Una vez que lo tenemos horneado lo sacamos y lo dejamos dentro del molde hasta que temple (aquí se seguirá cociendo) y después lo sacaremos con el papel y lo dejamos enfriar del todo encima de una rejilla. En ese momento lo envolveremos en papel film y lo guardaremos en la nevera hasta cortarlo.
  • Para cortarlo es importante que se enfríe mejor de un día para otro, pero si no podéis esperar hacedlo en el mismo día con delicadeza. Mojar la hoja del cuchillo en agua caliente y dejarlo algo húmedo, para que no se pegue en el bizcocho y podamos cortarlo con facilidad.
  • La superficie quedará como una costra que guardará el centro del brownie esponjoso y mojado pero cocinado.

Espero que lo disfrutéis!!!